Cada año se producen en el mundo 40 millones de toneladas de manzanas, siendo la cuarta fruta más producida a nivel mundial después de la uva, naranja y plátano, constituyendo una opción ideal para nuestros hijos, especialmente durante la alimentación complementaria.
La manzana es considerada la reina de las frutas debido a sus virtudes culinarias y medicinales, así como su fácil combinación con cualquier alimento. Es rica en hidratados de carbono; también posee vitaminas como C y E, y minerales como potasio e hierro, aunque en pocas cantidades.
Este sencillo pero prodigioso alimento tiene propiedades antidiarreicas, laxantes (aunque parezca contradictorio tiene ambas propiedades), diurética, depurativa, tiene la capacidad de disminuir el nivel de grasas de la sangre, tonificante del sistema nervioso, alcalinizante y antioxidante.
Dentro de su composición podemos resaltar:
- La pectina, la cual ayuda en la prevención del cáncer ya que previene el envejecimiento prematuro de las células y ayuda a combatir el exceso de radicales libres. Favorece la prevención especialmente del cáncer de colon, también por su buena cantidad de fibra.
- La quercetina, previene accidentes cardiovasculares, además ayuda a regular los niveles de colesterol en sangre.
- Su alto contenido en potasio reduce la acumulación de líquidos, evita calambres y reduce la presión arterial.
- La fibra que posee ayuda resulta eficaz para regular el tránsito intestinal, tanto contra el estreñimiento como en casos de diarrea, también colabora en la regulación de la glucosa en sangre.
- Su contenido de vitamina E, ayuda en la salud de la piel, hidratándola y retrasando su envejecimiento.
En la dieta de tu bebé, puedes ofrecerla rallada, asada al horno, cocinada o en la preparación de unas sabrosas panqueques que tanto gustan a nuestros niños. También puedes ofrecerla cruda, aunque de esta forma nunca la ofrezcas en niños menores de 3 años, debido al riesgo de atragantamiento.
Por todas estas virtudes y su agradable sabor, es una de las frutas que utilizamos para iniciar la alimentación complementaria de nuestros niños y dentro de una dieta balanceada y nutritiva en cualquier etapa de la vida